Connect with us

Deportes

Con un gol de Julián Álvarez, el Manchester City aplastó 4-0 al Chelsea

El equipo de Pep Guardiola se impuso por 4 a 0 con dos tantos de Mahrez, otro del argentino de penal y otro de Phil Foden.

Publicado

on

julian alvarez manchester city

El Manchester City recibió en el Etihad Stadium al Chelsea, en un encuentro válido por la tercera ronda de la FA Cup. El espectáculo comenzó con una clara presión del equipo de Pep Guardiola, con la que intentó manejar la posesión del balón y ponerse en ventaja de inmediato. El choque s mantuvo igualado hasta los 23 minutos de la etapa inicial, cuando un tiro libre espectacular de Ryan Mahrez hizo delirara a los Ciudadanos.

La magnífica conquista se ajustó al desarrollo del pleito, dado que el dueño de casa había amenazado con llegar a la red a través de intervenciones de Julián Álvarez y Cole Palmer, quien recibió una asistencia en profundidad, ingresó al área y definió al primer palo sin mucho ángulo. En tanto que el delantero argentino, mejor posicionado, le pedía el pase por el centro.

El grito del argelino, que fue al que le cometieron la falta, comenzó a gestarse desde que acomodó la pelota y disparó por encima de la barrera. Una obra brillante que sirvió para marcar el primer tanto del partido y su segundo consecutivo frente al Chelsea, después de haberle dado la victoria en el duelo por la Premier League del pasado jueves.

El dominio local continuó durante todo el primer tiempo. Por lo tanto, cuando Kai Havertz tocó la pelota con la mano dentro del área, el cordobés con pasado en River Plate extendió la diferencia desde los doce pasos. El compromiso comenzó a resolverse de forma prematura para los del estratega catalán. Y antes de llegar al descanso, sus dirigidos habías transformado el triunfo en goleada.

El encargado de concretar el 3-0 fue Phil Foden a los 38 minutos. Al Manchester City le sobró un tiempo para garantizarse un lugar en la siguiente instancia de la competición doméstica.

En el complemento, el pleito continuó con la misma tendencia. La superioridad del anfitrión fue tan notoria que recién en el cierre de la jornada, Phil Foden fue derribado por Kalidou Koulibaly y Riyad Mahrez, de penal, fusiló a Kepa Arrizabalaga para sellar y decorar el 4-0.

En el torneo más añejo del mundo, el Manchester City volvió a demostrar por qué es considerado uno de los principales candidatos al título. Los de Pep Guardiola expusieron una gran producción sin la necesidad de contar con la figura noruega de Haaland. En tanto, los de Graham Potter se despidieron con un duro golpe y deberán focalizar sus objetivos en la Premier League. En el Reino Unido el fútbol es Ciudadano.

Formaciones

Manchester City: Stefan Ortega Moreno, Kyle Walker, Manuel Akanji, Aymeric Laporte, Sergio Gómez, Bernardo Silva, Rodri, Phil Foden, Riyad Mahrez, Julián Álvarez y Cole Palmer

Chelsea: Kepa Arrizabalaga, Trevoh Chalobah, Bashir Humphreys, Kalidou Koulibaly, Lewis Hall, Conor Gallagher, Jorginho, Mateo Kovacic, Hakim Ziyech, Kai Havertz y Mason Mount.

TV: ESPN

Estadio: Etihad Stadium

Enfoque Now es una plataforma digital dedicada a conectar e informar a la comunidad latina acerca de los acontecimientos que suceden a nivel local e internacional.

Deportes

Magnus Carlsen explota tras perder partida con el campeón mundial de ajedrez

El joven Gukesh, de 19 años, se impuso al experimentado ajedrecista en el Norway Chess 2025

Publicado

on

La sexta ronda del Norway Chess 2025 dejó una de las escenas más impactantes y emotivas del ajedrez reciente. Magnus Carlsen, número uno del mundo, sufrió en casa una inesperada derrota frente al joven campeón mundial indio, Gukesh Dommaraju, quien se impuso ante el noruego por primera vez en una partida clásica. La tensión contenida en cada jugada marcó un duelo histórico que culminó con la furia de Carlsen y la incredulidad de Gukesh ante lo que acababa de lograr.

Desde la apertura, Carlsen llevó la iniciativa y ejerció una presión constante sobre Gukesh con las piezas negras. El noruego capturó un peón central clave y, a lo largo de veinte movimientos en el medio juego, las computadoras otorgaban a Carlsen una clara ventaja, que llegó a significar entre -2 y -5 en la valoración, equivalente a la superioridad de toda una torre. Parecía que la victoria no se le podía escapar al anfitrión.

En el movimiento 17, Carlsen se dirigió al confesionario del torneo para compartir en directo para los espectadores sus sensaciones sobre el rumbo de la partida. Mostró confianza en que Gukesh aceptaría el reto de bloquear el centro e intentar ganar, en lugar de buscar un empate rápido. “Sé que Gukesh es muy ambicioso, y espero que ahora bloquee el centro para jugar a ganar, en lugar de liquidarlo y buscar el empate. Pero, objetivamente, mi posición es buena, y me encuentro cómodo”.

Lo inesperado llegó en el final: presionado por el reloj y quizás por exceso de confianza, Carlsen cometió dos errores en los movimientos 44 y 52. Esos fallos alteraron el destino que hasta entonces parecía inevitable. El campeón mundial indio, en un ejercicio de persistencia y concentración, supo exprimir cada opción disponible. Gukesh reconoció tras la partida que llegó a pensar en rendirse: “Pero decidí que no había nada de malo en hacer unos cuantos movimientos más, y seguir luchando por si acaso. Soy muy consciente de que nadie puede ganar así a Magnus en más de una partida de cada cien. Pero hoy ha ocurrido, me siento muy feliz, y seguro que mi familia también”.

El dramático desenlace sobrevino en el movimiento 62. Al descubrir que había dejado escapar la victoria y enfrentaba una derrota inminente, Carlsen golpeó la mesa con fuerza, provocando que las piezas cayeran. Luego, estrechó apresurado la mano de Gukesh, exclamó “¡Ay, dios mío!” y abandonó el escenario visiblemente enfadado. Minutos después, su vencedor le exoneró ante los medios: “Yo también he golpeado unas cuantas mesas en mi carrera deportiva, aunque sea mucho más corta que la de Magnus. Hay incluso algún vídeo sobre eso”.

 

Sigue leyendo

Deportes

PSG logra un récord histórico tras vencer al Inter en la final de la Champions League

Los franceses vapulearon 5-0 a los italianos en Alemania y se adjudicaron la primera Liga de Campeones de su historia

Publicado

on

París Saint Germain rompió todos los pronósticos, no porque fuera imposible que se quedara con la final de la Champions League ante Inter de Milán, sino porque ni el más optimista fanático del equipo parisino habrá imaginado que habría una diferencia tan importante entre un equipo y otro. Fue 5-0 para los dirigidos por Luis Enrique, que se llevaron la Orejona por primera vez en su historia a Parque de los Príncipes.

Lo cierto es que este abultado resultado resultó inédito: nunca en la historia de la Liga de Campeones se había registrado una distancia semejante entre dos finalistas. Solamente en tres oportunidades un conjunto le sacó cuatro goles de diferencia al otro: Bayern Múnich al Atlético Madrid en el partido desempate de 1974, Milan al Steaua Bucarest en 1989 y también Milan al Barcelona en 1994.

Por otra parte, hasta hoy solo dos clubes habían logrado anotar cinco goles o más en una final de Champions: Real Madrid, que le ganó 7-3 al Eintracht Frankfurt en la final de 1959/1960 con un triplete de Alfredo Di Stéfano y un póker de goles de Ferenc Púskas, y el Benfica de Portugal en la final de 1961/1962, ante el Real Madrid, aunque con una diferencia más estrecha de 5-3 a favor de los lusitanos.

Los Merengues, máximos exponentes de este certamen continental con 15 títulos, son los que se mantienen como el equipo que más tantos anotaron en una final por los siete convertidos en 1960.

Hasta ahora, el PSG solamente había disputado una sola final de Champions, con derrota 1-0 ante Bayern Múnich en la temporada 2019/2020 (gol de Kingsley Coman). Luis Enrique no solamente consiguió dejar una huella imborrable en la vitrina de la institución que desde hace años está siendo manejada por jeques árabes, sino que también elevó sustancialmente el nivel futbolístico de un equipo finalista de uno de los certámenes de elite del planeta. Lo que el París no había conseguido con los galácticos Lionel Messi, Kylian Mbappé y Neymar, ahora sí lo logró con figuras de menor nombre pero un funcionamiento casi perfecto.

 

Sigue leyendo